Morfología de las huellas
Autor: GRINPACH
Contenido cortesía de : Grupo de Investigaciones Paleontológicas de Chile
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Las huellas fósiles o paleoicnitas (del griego ikhnos = huella y paleo = antiguo), son las marcas dejadas por diversos animales en el barro y que las condiciones ambientales han permitido su preservación, por millones de años en los estratos geológicos, dejando una rica información sobre el dinamismo de los animales que las produjeron.
Para saber como se genera una huella, vamos a poner un ejemplo en nosotros mismos. Supongamos que nosotros mismos quisiéramos dejar testimonio de nuestro paso, dejando nuestras propias huellas. Para realizar nuestro cometido necesitamos buscar un lugar en donde el terreno esté humedecido, ya sea, un charco, la orilla de algún lago o la rivera de algún río. Primero debemos verificar si este terreno barroso tiene la consistencia suficientemente arcillosa para marcar nuestros pies, pues si el barro está demasiado húmedo la huella se deformara, pues al levantar nuestro pie, el barro se levantara adherido a él, por el contrario si el terreno está muy seco no tendrá la suficiente plasticidad para dejar nuestra marca, por tanto necesitamos un terreno ni muy húmedo ni muy seco, solo así podremos dejar marcados nuestros pies. Pero esto no es todo, luego de dejar las huellas, estas deben secarse con el calor ambiental y luego ser protegidas, o sea, ser cubiertas por otros sedimentos para impedir que agentes naturales las destruyan como el viento, el agua, los granizos o el paso de otros animales por encima de estas. Si nuestras huellas han conseguido sortear estos obstáculos, entonces tendremos una futura huella fósil.
También debemos considerar el peso del animal que produce la huella, ya que la consistencia del fango no es igual para animales distintos, por ejemplo, en un barro apto para dejar las huellas de un elefante, tal vez, no sea adecuado para dejar marcadas las huellas de un roedor pues la masa corporal es distinta.
Las huellas dejadas por un vertebrado bípedo o cuadrúpedo, dependerá de la conservación. Cuando en los estratos aparece una sola huella, esta entrega poca información, podemos saber a través de esta si el animal que la produjo poseía cojinetes o no, número de dedos en la pata, si tenía garras, el tamaño de la pata, en el caso de los dinosaurios si era terópodo o saurópodo.
El otro tipo es el conjunto de huellas denominado rastrillada que es el paso continuado de un animal sobre el barro, ya que por la naturaleza de estas nos pueden entregar la misma información de la huella aislada, más el aporte de saber si este animal corría o andaba lentamente, deducir su velocidad, si produjo algún cambio en la dirección de su caminar, si era cuadrúpedo o bípedo, etc.
MORFOLOGÍA DE LA HUELLA
En una huella aislada podemos anotar el largo y el ancho de la huella, el ángulo de rotación de la pata, la profundidad de la huella, número de dedos, estructura morfológica, presencia de cojinetes, largo de los dedos y de las garras.
En un conjunto de huellas o rastrilladas además de los anterior podemos anotar el ángulo del paso que es posible determinarlo a través de tres huellas consecutivas, podemos ver el largo del paso, el largo de la zancada, la anchura de la pista, la línea media o luz, que es la distancia entre las huellas del lado izquierdo y derecho, dirección de movimiento, si era cuadrúpedo o bípedo, tamaño de las manos con respecto a las patas, si era plantígrado o digitígrado, o sea si se apoyaba en los dedos o en toda la pata.
Si la pista es ancha nos indica que la huella la pudo producir un animal que poseía sus patas a los lados del cuerpo, como en el caso de los lagartos, en tanto que si las huellas son paralelas y continuadas nos demuestran que pertenecen a un animal de andar bípedo como por ejemplo un dinosaurio o un homínido, por lo tanto en éste caso la luz de la rastrillada es mínima y el ángulo de paso es mucho más extendido.
También tenemos otras características en las huellas ya que algunos animales son bípedos facultativos esto quiere decir que en ocasiones caminan en cuatro extremidades y en otras en dos, como es el caso de los Iguanodontes, también podemos obtener las dimensiones aproximadas de un animal cuadrúpedo obteniendo la longitud del hombro a la cadera, a partir de la distancia entre los puntos medios de las distancias de las extremidades anteriores y posteriores.
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